“No estoy disponible, estoy opositando”: cómo poner límites sin sentirte culpable

4/25/20252 min read

person in black long sleeve shirt holding white ceramic mug
person in black long sleeve shirt holding white ceramic mug

Preparar las oposiciones para profesor/a de inglés es mucho más que estudiar. Es una etapa de presión, emociones intensas, altibajos y (muchas veces) incomprensión por parte del entorno.

Si eres opositor/a, probablemente ya te habrás enfrentado a frases como:

  • “¿Pero todavía estás estudiando?”

  • “No puedes venir un rato, si solo es una cerveza…”

  • “Tú que tienes tiempo, podrías ayudarme con…”

Por eso, hoy hablamos de algo clave para la salud mental del opositor: cómo comunicar tus necesidades sin sentirte egoísta, raro o culpable.

1. Opositar no es solo estudiar, es un estilo de vida (temporal, pero exigente)

Necesitamos que nuestro entorno entienda que preparar una oposición no es como estudiar para un examen de la uni, ni como hacer deberes.
Es un compromiso diario que afecta al tiempo, la energía mental y emocional, la rutina, y hasta el ocio.

📌 Frase útil para comunicarlo:

“Durante este tiempo necesito organizar mi vida como si fuera un trabajo a jornada completa. No es que no quiera estar, es que necesito proteger mi energía para rendir.”

2. Habla claro y pronto (no cuando estás al borde del colapso)

Muchas veces callamos por no molestar. Hasta que explotamos.
Anticípate. Ten esa conversación incómoda antes de que surjan los malentendidos.
Explica tus horarios, tus momentos de máxima concentración, y qué necesitas de ellos.

🧠 Ejemplo:

“Mi mente funciona mejor por las mañanas. Me ayuda mucho tener ese bloque tranquilo. ¿Podemos intentar evitar interrupciones en esa franja?”

3. Pide comprensión, no permiso

No estás pidiendo favores. Estás compartiendo tus prioridades.
Tener límites claros no es egoísmo, es autocuidado. La oposición no será eterna, pero tu bienestar sí importa todo el tiempo.

💡 Propuesta: crea un pequeño “acuerdo de convivencia” con tu familia o pareja. No hace falta que sea formal, pero sí honesto:

  • Cuándo necesitas silencio

  • Qué tipo de apoyo te viene bien (emocional, práctico, etc.)

  • Cómo pueden ayudarte sin que tú lo tengas que pedir todo el tiempo

🙋4. Cada persona tiene su forma de apoyar (aunque a veces no lo parezca)

Hay quien te apoya cocinando, otros preguntando cómo vas, y otros simplemente estando.
No todos sabrán cómo ayudarte de primeras. Pero puedes enseñarles.

🎯 Guíalos:

“A veces solo necesito que me escuches sin darme soluciones.”
“Cuando me veas muy desanimada, un ‘vas bien, sigue’ me ayuda más de lo que imaginas.”

5. No hace falta desconectar del mundo, solo elegir bien tus recargas

No se trata de aislarte durante meses. Se trata de elegir bien con quién y cómo te recargas.
Evita los entornos que te hacen sentir juzgado o agotado. Prioriza los que te dan paz y te recuerdan que vales más que tu nota.

🌿 Una hora con alguien que te respeta como opositor/a puede darte más fuerza que tres horas con quien te hace sentir culpable.

En resumen, ser opositor/a no significa solo estudiar bien. Significa aprender a cuidarte mientras estudias. Y eso incluye comunicar tus límites, pedir apoyo, y rodearte de personas que suman.

Hablar claro no te hace débil. Te hace más fuerte.